top of page

Carlota no es una mascota.

Es una gata negra que llegó a mi vida sin hacer ruido, pero con una presencia que lo cambia todo.


No me buscó. Me observó. Me eligió.

Y desde entonces, ha sido una de mis mejores maestras.


Con Carlota entendí que el liderazgo —el de verdad— no grita, no ordena, no exige.

Solo está. Y transforma.


Ella me enseñó que los vínculos no se fuerzan. Se construyen.

Que la confianza no se impone. Se gana.

Que el respeto empieza por aprender a leer lo que no se dice.


Quise entrenarla. Me ignoró.

Hasta que un día, simplemente vino. Porque quiso. Porque confió.


Carlota me enseñó que a veces el mejor aprendizaje ocurre en silencio.

Que no todo se trata de control, métricas y eficiencia.

A veces, se trata de presencia. De conexión. De dejar espacio.


Yo no entrené a Carlota.

Fue ella quien me entrenó a mí.


Muy pronto un nuevo concepto con mi verdadera esencia . Ya no atenderemos solo perros y gatos . Atenderemos vínculos

Petexperts ❤️


Y tú, ¿estás escuchando a quienes no tienen voz, pero tienen algo que enseñarte?

Comments


  • Facebook
  • X
  • Instagram
  • TikTok
bottom of page