¿Te ha mirado así tu perro?

Con el blanco del ojo asomando, como si intentara decirte algo…

Eso se llama esclerótica visible.

Y no es casualidad.

Es una forma de comunicación.

Los perros aprendieron a usar su mirada para conectarse con nosotros.

Giran la cabeza, levantan la ceja, te clavan los ojos…

Porque saben que así captan tu atención.

A veces porque necesitan cariño,

otras porque algo no anda bien.

Cuando el blanco del ojo se ve más de lo normal,

puede ser una señal de estrés.

Se llama “ojo de ballena”.

Y es una alerta.

Una forma silenciosa de decir: “esto me incomoda”.

El problema es que muchas veces no lo vemos.

Estamos tan acostumbrados a hablar, que nos olvidamos de observar.

Y ellos no usan palabras.

Usan el cuerpo, los gestos… y los ojos.

No se trata solo de obediencia.

Nuestros perros nos leen, nos sienten, nos entienden.

Aprendamos también nosotros a escucharlos sin que hablen.

Porque comunicarse no es gritarles,

es mirar con atención.

¿Lo has notado en tu perro?

Quizás esa mirada te está diciendo mucho más de lo que creías.