La recuperación de especies silvestres en nuestra Amazonía es una labor que muchas veces tiene poco reconocimiento. Sin embargo, existen grupos y organizaciones que se dedican de manera anónima sin esperar un reconocimiento de la sociedad a esta altruista labor, pero sin la intervención de este grupo de personas algunas especies pueden ser perjudicadas notablemente.

El Centro de Rescate Amazónico - CREA es una Fundación ubicada en Iquitos que nació gracias al esfuerzo mancomunado entre el Dallas World Aquarium Zoo, el Instituto de Investigaciones de la Amazonia Peruana y Acobia-DWAzoo; cuyo objetivo es brindar apoyo interinstitucional para el rescate, rehabilitación y liberación de especímenes de mamíferos acuáticos y fauna silvestre en peligro en Loreto, afianzados mediante un programa de educación ambiental.También desarrolla actividades de ecoturismo, investigación y cuenta con un programa de voluntariado y prácticas.

“Cada uno de nuestros animales tiene su propia historia, única y especial de supervivencia. Al contar sus historias, esperamos que pueda comenzar a comprender mejor lo que experimentan estos animales desde el momento de su rescate, hasta su proceso de rehabilitación y, más tarde, hasta su liberación en la naturaleza”. Nos cuenta Javier Velásquez, director de CREA.

Durante nuestra estancia aquí, pudimos ver la realidad de cada una de estas especies, conocimos interesantes historias y pudimos participar en la liberación de un búho que había sido rehabilitado aquí.

Entre otras funciones el centro tiene a cargo el programa de rescate de manatíes, el cual es una de los más importantes de la Amazonía, por la importancia de este mamífero en el ecosistema.

“Muchas crías de manatíes son capturadas vivas y comercializadas ilegalmente como mascotas; debido a que su cuidado es muy exigente, estas crías terminan muriendo” que habían muerto en cautividad; con el fin de detener esta problemática, se inició el programa de rescate de manatíes lográndose hasta la fecha el exitoso rescate y rehabilitación de 40 manatíes, así como de otras especies como delfines rosados, osos hormigueros, osos perezosos, entre otros”, nos cuenta su director.

El rescate de Junia es el ejemplo más claro de lo que se puede lograr cuando se juntan diversas instituciones. Ella fue capturada por traficantes luego de matar a sus padres para venderlos como carne. Este hecho ocurrió en la localidad de Tamshiyacu en Iquitos.

Afortunadamente gracias a las redes sociales y a la difusión que ustedes ayudaron a hacer compartiendo y reposteando la denuncia se pudo rescatar a este manatí.

La Fiscalía Especializada en Materia Ambiental de Iquitos, hizo suya esta denuncia y en colaboración con la Capitanía de Puerto logró el rescate del bebé manatí que fue trasladado en coordinación con la Dirección Regional de la Producción de Loreto al Centro de Rescate – CREA, en donde viene recibiendo el cuidado adecuado en espera de su pronta recuperación.

Félix Búho fue víctima de la urbanización de nuestra Amazonía, donde las áreas verdes cada día se ven reducida por la “selva de cemento”. Él se estrelló contra una luna provocándole una ulcera corneal, por la que casi pierde la visión de un ojo. Afortunadamente pudo recuperar la vista gracias a la labor de los trabajadores y voluntarios que trabajan allí.
Hoy Félix Búho vive feliz en su hábitat, gracias a quienes anónimamente trabajaron para poder darle una mejor calidad de vida.

Pero tristemente no todas las historias tienen un final feliz. Casos como el del perezoso de menos de un mes de nacido, que fue capturado para venderlo mientras mataban a la madre que se aferraba a su cría son muy comunes.

Como él, en el centro existen varios osos perezozos que son atendidos por profesionales y especialistas, que tienen el mayor cuidado, pues en cautiverio es muy común que sufran de neumonía.

Oso “el hormigoso” es, tal vez, uno de los casos más tristes. Cazaron a su mamá cuando él era tan solo una cría, un golpe de ellos le alcanzó en la pata derecha la cual le ocasionó una fractura en el brazo y se lo llevaron para tenerlo como mascota desde ese entonces.

Ahora se encuentra en el centro siendo rehabilitado, tomando su dosis de leche y saliendo al aire libre a buscar sus nidos de hormigas y termitas.

Desafortunadamente, por su lesión, este pequeño no podrá regresar a la naturaleza, pero durante este tiempo pudo desarrollar la habilidad de desplazarse y conseguir su alimento con solo una pata delantera.
El proceso de rehabilitación es una de las acciones fundamentales que desarrolla el Centro de Rescate Amazónico, consiste en adaptar a los especímenes a su nueva dieta alimenticia y aplicar los tratamientos veterinarios necesarios; con la finalidad de lograr una exitosa recuperación.
Desde el punto de vista social el centro cuenta con un programa de educación ambiental. “Nuestro programa tiene por finalidad educar y sensibilizar a niños amazónicos de Iquitos y comunidades ribereñas sobre la importancia de la conservación de la biodiversidad, disminución del tráfico de especies y el uso sostenible de los recursos naturales, con énfasis especial en la conservación del manatí amazónico”, nos explica Javier Velásquez.

Empleando diferentes estrategias que incluyen talleres, cuentos, actividades lúdicas, exploración vivencial del bosque, entre otras. Hasta la fecha, más de cien mil niños de la Amazonía han participado de sus actividades y se han convertido en valiosos aliados para la conservación
“También esperamos difundir la crisis de extinción de especies que estamos experimentando no solo en el Amazonas sino en todo el mundo y lo importante que es para nosotros actuar para conservar estas especies y sus hábitats”. Enfatizó Velásquez.

Para la rehabilitación de todas estas valiosas e importantes especies ellos se sustentan con la entrada que hacen los visitantes al parque, pero también reciben donaciones en forma de alimentos y medicinas que necesitan sus inquilinos.

Si quieres ser padrino de alguno de sus residentes comunícate con ellos para que te indiquen como puedes ayudarlos a ayudar.

Todos los animales son importantes, pero algunos necesitan de nuestra ayuda. Todos debemos hacernos responsables y estar orgullosos de nuestra Amazonia.
Gracias al Centro de Rescate Amazónico - CREA, por la gran labor que hacen por nuestras especies amazónicas.