Todas los que aman a los animales y tienen la ilusión de tener una mascota lo primero que piensan es en ir a una tienda, por un animal de raza o recién nacido.

Si nos paramos a pensar, tener una mascota no es ir a la tienda y comprar el peluche que veamos más bonito. Nuestra futura mascota es un ser vivo del que tenemos que cuidar.

La gran diferencia entre la compra y la adopción de mascotas reside en que la venta de animales en tiendas tiene como principal objetivo el obtener un beneficio económico y en las protectoras de animales el fin principal es poner fin al abandono animal y encontrar un hogar para todos los animales que no tienen una familia que les dé su cariño.

Millones de animales no tienen un hogar y todos los días esperan a esa familia mágica que los quiera bien. Tener una mascota en casa es una gran responsabilidad, no solo se trata de alimentarla, asearla y sacarla a pasear, además es fundamental entrenarla y darle mucho amor.

Si estás considerando sumar un miembro a tu familia, mejor adoptarla. Al hacerlo sentirás una inmensa satisfacción, además lo ayudarás a tener una mejor vida.

Y si aún lo dudas, aquí te damos algunas razones para tener un nuevo amor en tu vida: salvas una vida, te hacen compañía, no apoyarás el tráfico ilegal de animales. te mantienen activo, le das una segunda oportunidad a un ser vivo que lo necesita, te ayudan a distraerte, te brindan amor incondicional, tendrás un compañero y confidente, pues sabe guardar secretos

Recuerda que, muchos de los casos de abandono que llegan a los albergues de animales, son casos de maltrato, algunos de extrema gravedad y el albergue se encarga de recuperar a ese animal tanto física como psicológicamente para que pueda ser integrado en una familia que esté dispuesta a otorgarle una vida plenamente feliz.

Es por eso que la adopción es tan importante, se toma la responsabilidad de un ser vivo que un dueño previamente ha abandonado o dejado en un refugio de animales.

Tal vez te resulte abrumador adoptar un perro, pero traer un cachorro a casa también es divertido y emocionante. Es el primer momento para establecer una relación entre muchas que tendrás con tu nuevo amigo.

Aquí te dejamos unos consejos para asegurar una transición sencilla para todos.

Consigue todo lo necesario: Esto lo hará sentirse seguro y cómodo antes de traerlo a casa. Aquí puedes considerar el collar, correa, platos para alimento y agua, una cama para perro, juguetes, premios y artículos para su limpieza.

También es buena idea tener material de entrenamiento y limpiador a la mano para los accidentes durante la primera etapa en casa.

Acondiciona tu casa: Es buena idea preparar la casa antes de que el cachorro llegue a casa. Guarda los artículos que pudieran ser peligrosos para cachorros muy pequeños o curiosos, y quita aquellas cosas que no quieres que muerda.

También debes preparar a la familia. Discutan quien o quienes se encargarán de la alimentación, paseo y entrenamiento. Si vives con otros animales revisa sus vacunas por seguridad de todos. En caso que tengas gatos deja una zona libre de perro a donde se puedan retirar, ofreciéndoles una manera de aclimatarse a la excitación del recién llegado, a su propio ritmo.

Acondiciona un espacio seguro para él: El nuevo miembro de la familia debe contar con un espacio privado. Algunos perros ven las jaulas transportadoras como su habitación para descansar. También funcionan como un sitio donde se sienta seguro en la primera etapa de su nueva vida.

Planea el momento indicado para traerlo a casa: Procura estar disponible para él los primeros días, si se acostumbre a que estés en casa constantemente, puede desarrollar ansiedad por separación cuando regreses a trabajar. Pide a alguien que te acompañe para que lo consuele mientras lo llevas a casa. Lleva su collar y correa, y tráelo directo a casa para que no se distraiga.

Enséñale su nuevo hogar: Permítele que explore y olfatee el interior. Enséñale donde estará su alimento, cama, juguetes y hazle saber sus límites con comandos cortos pero firmes como NO o ALTO.

Si tiene patio explóralo con él sin sacarle la correa: Debe tener suficiente tiempo y espacio para olfatear su nuevo hogar. Si orinará en el patio, llévalo a él, felicítalo y prémialo cuando lo use exitosamente.

Preséntale a su nueva familia: Es recomendable presentarle a cada integrante de la familia y si tuvieras otros perros a ellos también, uno a la vez, para que conozcan al nuevo can.

Evita que los niños besen al perro, aún no está acostumbrado a ellos, ya habrá tiempo que puedan hacerse amigos con un olfateo y un premio.

Cambia su alimento poco a poco: Es preferible incorporar un poco del alimento que le daban en el albergue e ir cambiando poco a poco la comida de tu perro a la marca que escogiste para evitar problemas estomacales debidos al cambio de dieta.

Entrénalo de inmediato: También un perro adulto recién adoptado requiere un poco de entrenamiento. Si planeas entrenar a tu perro con un canil muéstrasela apenas llegue a la casa y practica dejándolo en ella, con un juguete o premio, durante periodos de tiempo cortos mientras sales de casa para permitir que se aclimate.

Visita a un veterinario: Durante los primeros días de convivencia debes visitar a un veterinario para una revisión general y para asegurar que tenga todas sus vacunas. En la Clínica Veterinaria Pancho Cavero estamos para hacer de esa transición lo más fluida posible y contamos con los mejores especialistas para la revisión de tu mascota y así prevenir cualquier dolencia o enfermedad.

Recuerda que adoptar un perro es un gran cambio para los dos. Es un proceso que el perro y la familia deben seguir de la mano. Por eso debes estar atento a estos aspectos que ayudarán al nuevo integrante a sentirse seguro en su nueva casa y será más fácil que te integres con tu nuevo amigo.